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jueves, 7 de junio de 2012

Cardenal pide a Dios ilumine a DM ; llama unidad HM y MVM

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SANTO DOMINGO.- El Arzobispo Metropolitano de Santo Domingo, Nicolás de Jesús Cardenal López Rodríguez, pidió al Señor este jueves que asista al presidente electo, Danilo Medina, en el proceso de organizar su Gobierno, al tiempo que solicitó a los dos líderes del PRD, Hipólito Mejía y Miguel Vargas Maldonado para que se calmen y controlen a sus simpatizantes para ver si se puede encontrar en dicho partido una solución por la vía civilizada y democrática.

Al pronunciar la homilía principal en el encuentro eucarístico familiar con motivo del Día de Corpus Cristi, celebrado en el Estadio Olímpico de Santo Domingo, López Rodríguez, además abogó por la unidad de la familia dominicana en estos momentos de dificultades, no solamente en el país, sino a nivel mundial.

“Sabemos que el Señor Presidente electo está en el proceso de organizar su Gobierno, pedimos al Señor que le asista en este delicado momento”, manifestó el prelado de la Iglesia Católica dominicana.

Afirmó, asimismo, que el país confía “en que su claro y esperanzador discurso de campaña encuentre vías concretas de ejecución”.

Dijo que aunque no desconocemos las dificultades que se ciernen en el panorama internacional, “confiamos que con un buen equipo de trabajo, Medina sabrá enfrentar con valentía y acierto esos desafíos”.

Recordó que hay algunos puntos en que muchas personas coinciden al señalar prioridades para el nuevo Gobierno, como son la inseguridad a la que se ha referido, el fomento del empleo, la equidad en el monto de los salarios de las personas que prestan servicios públicos, el tema de la educación comenzando por la mejor capacitación de los maestros y obviamente una mejor remuneración de su trabajo.



Además, apuntó que no debe olvidarse el campo dominicano, ya que éste puede producir más y debe producir más.

En su homilía, López Rodríguez, también se refirió a la regulación de la inmigración haitiana, de la que anotó que sin que se descuide la regulación que es un tema del que se aprovechan los enemigos de la República Dominicana, comenzando por algunos dominicanos con el apoyo de gente que carece de autoridad moral para mencionar el tema migratorio.

Al acto religioso asistieron miles de creyentes católicos, y el mismo se inició con una caminata que partió de los alrededores de la Plaza de la Salud, hasta terminar en el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte.

Durante su intervención el prelado católico pidió a Dios que haga valer su poder sobre los violentos que viven al acecho y en la búsqueda de potenciales víctimas, para que frustre los proyectos de los delincuentes narcotraficantes y sus perversos cómplices locales e internacionales.

Al referirse al desarme de la población civil, afirmó que mucha gente aboga por esto, pero hay que comenzar por desarmar a los que llevan armas no para defenderse sino para agredir.

Expuso, asimismo, que esto está obviamente vinculado con otra realidad y es la incapacidad, al menos parcial, de las autoridades para garantizar la seguridad de la ciudadanía.


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