Danilo también mostró apego a Dios en discurso de juramentación

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El nuevo Presidente de la República dio una muestra fehaciente de apego y creencia en Dios, al no solo invocar varias veces al Altísimo sino que también se encomendó al Todopoderoso para que le permita hacer un buen ejercicio del poder desde el Palacio Nacional. Danilo Medina, en el discurso de más de una hora ante la Asamblea Nacional donde tomó juramento, consideró importante, primero, inclinarse humildemente, agradecido ante Dios.

Igualmente, le pidió al Creador que lo mantenga siempre en el camino de la justicia, del amor, de la humildad, de la compasión y del equilibrio.

También apeló a Dios para que nunca lo deje llevar por la soberbia, el odio, la frialdad, la insensibilidad, la vanidad, la arrogancia y la prepotencia.

“Dios es testigo de mi sinceridad”, dijo Danilo como prueba de que predicaba la verdad cuando evocaba y delineaba punto por puntos sus planes de gobierno en su discurso de juramentación.

La fe cristiana del nuevo mandatario también quedó expresada cuando proclamó: “Mi guía será aquella frase del Evangelio: “Por sus frutos los conoceréis”.

Asimismo, Danilo dio gracias a Dios porque la República Dominicana ya no tiene más caudillos, ni patrones, ni amos.

“Estoy aquí, de pie, ante Dios, ante mi pueblo, ante los representantes de la democracia dominicana y ante la comunidad internacional para decirles que no puedo imaginar un mayor honor que haber sido elegido presidente de mi país”, fue la primera ocasión de cuatro que Medina invocó al Todopoderoso en su histórica intervención